La CONMEBOL escogió a los estadios Maracaná de Rio de Janeiro (Brasil) y el Mario Alberto Kempes de Cordoba (Argentina), para albergar las finales del próximo año de la Copa Libertadores de América y Copa Sudamericana, respectivamente.
La decisión se dio a conocer durante la mañana de este jueves, luego de la reunión que sostuvo el ente rector del fútbol sudamericano en la ciudad paraguaya de Luque. De esta forma, Rio de Janeiro y Cordoba tomarán los testigos que dejen Santiago y Asunción, quienes hospedarán las sedes de las finales únicas este 2019, siendo la primera vez que ambas competencias definan a su campeón a un solo partido y en territorio neutral.
El mítico escenario brasileño se impuso al estadio Mineirao, en Belo Horizonte; Arena do Gremio, en Porto Alegre; Estadio Beira-Rio, también en Porto Alegre, y Estadio do Morumbi y Arena Corinthians, ambos en Sao Paulo, y también al estadio Nacional de Lima.
Por su parte, el recinto cordobés fue escogido por encima del estadio Único de La Plata en Argentina y el estadio Mané Garrincha de Brasil.
La entidad añadió que la final de la Libertadores será el 21 de noviembre y la de la Copa Sudamericana el 7 de noviembre del próximo año.
Para la selección de las sedes un equipo de asesores técnicos visitó de forma oficial los estadios y evaluaron las características técnicas y campos de entrenamiento y los requisitos de seguridad.
También se tuvo en cuenta la movilidad y el alojamiento que ofrece la ciudad, así como los aspectos sociales, políticos, medioambientales y comerciales del lugar.
