Carlos Salcedo, el futbolista linchado por una fiesta tras perder con Cruz Azul

Carlos Salcedo en un partido de Liga MX del pasado 2 de septiembre, cuando Cruz Azul perdió ante el América. (Héctor Vivas/Getty Images)
Carlos Salcedo en un partido de Liga MX del pasado 2 de septiembre, cuando Cruz Azul perdió ante el América. (Héctor Vivas/Getty Images)

Cruz Azul ha estado adormilado desde el 30 de mayo de 2021, cuando ganaron el ansiado título de Liga MX con el que rompieron su sequía de casi 24 años. Desde entonces, las decepciones se suceden una tras otra. Y Carlos Salcedo, defensa de La Máquina, se encargó de añadir un nuevo capítulo de indignación para la afición celeste, que explora, de nuevo, nuevas vías de sufrimiento. La derrota ante Querétaro, por 3-1 en el Estadio Azteca, sumió a los cementeros en la amargura total.

Marchan en el penúltimo lugar de la competencia, con apenas cinco puntos en nueve partidos (los mismos que el Puebla, pero con mejor diferencia de goles). Han ganado apenas un cotejo en todo el Apertura 2023 y el entrenador Joaquín Moreno no encuentra solución a los problemas que han legado sus antecesores. En este año, Cruz Azul ha devorado a dos directores técnicos: Raúl Potro Gutiérrez y Ricardo Tuca Ferretti. De Gutiérrez fue normal esperarlo, pues había llegado como interino y nunca tuvo argumentos de peso para ocupar ese cargo. Con Ferretti fue más doloroso, pues su experiencia y éxitos lo hacían ideal para levantar el barco celeste.

No pudo hacerlo porque hay una realidad que carcome a Cruz Azul, sea cual sea su entrenador: tienen un plantel mal armado, con jugadores que no brindan soluciones y muy pocos que se salvan. Con Ferretti, también llegó Carlos Salcedo, un defensa central que siempre ha tenido condiciones para brillar no sólo en México, sino también a nivel internacional (fue campeón de Copa en Alemania con el Eintracht Frankfurt y jugó de manera sólida el Mundial de Rusia 2018).

Pero no todo en el futbol es cuestión de condiciones. El talento es una fracción del pastel completo. A Salcedo lo han acompañado un sinfín de problemas extracancha y sus actitudes han sido cuestionadas de manera infinita por todas las aficiones de los clubes que ha defendido. Ahora en Cruz Azul tienen un nuevo argumento. Al acabar el partido contra Querétaro, Salcedo organizó una fiesta con motivo de su cumpleaños —que es el próximo viernes, aunque al parecer quiso festejar anticipadamente—. Las fotografías y videos del festejo fueron subidos a redes sociales por diversos invitados —figuraron otros jugadores de Cruz Azul como Rodríguez, Antuna y Cambindo—. La bomba estalló y, a nivel institucional, Cruz Azul no tuvo otra opción más que brindar una disculpa.

En conferencia de prensa, Óscar Conejo Pérez, director deportivo celeste y leyenda del club, la envió un mensaje a los cruzazulinos: "El motivo de la cita, de la conferencia, es un poquito por la situación que está pasando el club, en la que estamos inmersos. Dar la cara: decirle a nuestra gente que estamos apenados por esta situación, que sin duda ha sido un torneo malo. Todos estamos consciente de ello, principalmente los muchachos".

Y sobre la fiesta de Salcedo, Pérez fue concreto: "Son desafortunados por los tiempos y por el momento que se está viviendo; cada quien es responsable de sus actos. En lo deportivo, todo cuenta. Al final del torneo valoráremos todo y veremos qué sigue", señaló el exportero. Ahora Salcedo enfrenta una doble ración de críticas: las de su rendimiento dentro del campo y las externas, porque la afición no deja pasar nada y menos después de una derrota tan dolorosa como la que le fue propinada por Gallos Blancos.

Es verdad que los futbolistas también tienen derecho a una vida privada, pero la fiesta de Salcedo fue cuestionada incluso por sus propios compañeros. "Somos profesionales y no sólo dentro de la cancha. Es 24//7. Cada aficionado pone su dinero para vernos jugar. Lo malo es que no estamos respondiendo", señaló Erik Lira. "Me enteré hace unas horas. El día de mañana tocaremos ese tema porque estábamos tristes, no pensábamos que fuera a pasar algo así", expreso Ignacio Rivero. Cruz Azul no levanta y los problemas siguen llegando. Todo por una fiesta que pecó de inoportuna e insensible.

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