Juan Fernando Quintero anticipó su salida de River con un mensaje en las redes sociales y ya se lo vincula con un club grande de Brasil

Juan Fernando Quintero deja River después de un segundo ciclo que tuvo pocas señales positivas.
Juan Fernando Quintero deja River después de un segundo ciclo que tuvo pocas señales positivas. - Créditos: @Luciano Bisbal

El segundo ciclo de Juan Fernando Quintero en River duró menos de un año y su salida del club estuvo lejos de ser por la puerta grande. Todo lo contrario. Casi por la ventana de atrás y a oscuras. “No traten de entenderlo. Siempre fui feliz en River. Digan lo que digan sólo tengo que agradecer a todo el Mundo River. Acá tienen un hincha de por vida. Gracias y feliz año para todos”, escribió el futbolista este viernes en las redes sociales.

Fue la despedida menos pensada, luego de semanas de charlas privadas en pos de la continuidad en el equipo millonario... o de dejar pasar el tiempo hasta que quedara libre. No hubo un comunicado oficial. Su futuro lejano al club quedó al desnudo en un posteo que pareció sorprender hasta a algunos de sus compañeros. Ya no es una incertidumbre para Martín Demichelis: el flamante DT sabe que no contará con el mediocampista colombiano, que se ganó la idolatría de los hinchas millonarios en la etapa anterior pero cerró una última temporada de escasa participación, por lesiones y bajo rendimiento, sin actuaciones descollantes ni goles determinantes.

Quintero, que el 18 de enero cumplirá 30 años, brilló en River especialmente en 2018, tras llegar en préstamo desde Porto, de Portugal. Sus goles y sus grandes desempeños lo convirtieron en una de las estrellas mimadas por Marcelo Gallardo y lo devolvieron a la selección de su país, en la que jugó el Mundial de Rusia tras estar en Brasil 2014. Aquel año escaló a la cúspide de veneración con un tanto y una asistencia en el 3-1 sobre Boca en el cruce decisivo por la Copa Libertadores, disputada finalmente en Madrid.

La final River-Boca en Madrid

Tanto descolló que se puso al público en un bolsillo. Y, bajo el clamor popular, nadie dudó en enero de 2019 de ejecutar la opción de compra de 3.500.000 euros para que continuara en la entidad. Aquel verano siguió marcando goles de todo tipo. Uno de ellos, un tiro libre frente a Racing, terminaría nominado para el Premio Puskas como uno de los tres mejores de la temporada. Pero esa misma temporada daría para él un gran vuelco: la rotura del ligamento cruzado de la rodilla izquierda lo tendría 208 días sin jugar oficialmente.

En el regreso luego de casi siete meses fue ovacionado cuando ingresó en el segundo tiempo de un cotejo que por la Copa Argentina River le ganó por 2-0 a Almagro. Lo que siguió no estuvo a la altura de lo soñado: hasta volver a gritar un gol con la camiseta rojiblanca pasó un año, y ese tanto fue de penal, ante Defensa y Justicia. En octubre de 2020 se despidió, tentado desde la Superliga de China. El paso por el club Shenzhen no levantó polvareda.

Juanfer no estaba a gusto y coqueteaba con un retorno a River, algo que se cumplió el 21 de enero pasado, una semana después de que lo anticipara en una rueda de prensa previa a un amistoso de la selección colombiana. El hilo rojo volvió a unir al brillante volante creativo con el club en el que obtuvo cuatro de sus seis trofeos como futbolista profesional. Pero nada fue como antes. Jugó 36 partidos entre los torneos locales y la Copa Libertadores, anotó siete goles y registró ocho asistencias este año.

Quintero y Gallardo, un amor que nació cuando eran rivales
Quintero y Marcelo Gallardo, un afecto que nació cuando el jugador y el entrenador eran rivales.

Este sábado se vencerá su contrato y los trascendidos lo vinculan muy cerca de Flamengo, al que dirige Vítor Pereira, que en 2016 quiso llevar a Quintero a Fenerbahçe, de Turquía. Actualmente Pereira conduce a un equipo de estrellas que jugará en Marruecos el Mundial de Clubes por ser el campeón de la Libertadores. Algunos afirman que hay un acuerdo por 2,5 millones de dólares anuales.

Lo concreto, sí, es la salida de Quintero de River, el club que lo hizo llorar de emoción por sus logros y, también, por otra despedida: la de Gallardo como entrenador. Fue el propio número 10 el que tomó el micrófono y leyó en un estadio Monumental colmado la carta de agradecimiento dedicada al Muñeco en la noche del adiós. Esta vez, no hubo dinero ni amor que permitiera la continuidad del mediocampista en el club. Y Juanfer se fue sin frotar la lámpara. Con un simple mensaje en las redes.