Nadie domina el arte de la "trivela" como portugués Quaresma

El delantero de Portugal Ricardo Quaresma celebra tras convertir frente a Irán en su duelo por el grupo B de la Copa del Mundo en Saransk, Rusia, jun 25, 2018. REUTERS/Matthew Childs

Por Brian Homewood

(Reuters) - El delantero de Portugal Ricardo Quaresma tuvo que esperar hasta los 34 años para jugar su primera Copa del Mundo y correspondía que su primer gol en el mayor escenario del deporte contra Irán el lunes fuera con su exclusiva habilidad: la "trivela".

La "trivela", una palabra portuguesa que lentamente se arrastra a otros idiomas, es el difícil arte de dar efecto a la pelota con la parte exterior del pie y Quaresma posiblemente es su mayor exponente actual.

Justo antes del medio tiempo, Quaresma recogió el balón cerca de la línea de banda, jugó una pared y lanzó un tiro curvo por encima del portero Alireza Beiranvand. El empate 1-1 ayudó a Portugal a entrar en octavos de final, donde enfrentará a Uruguay.

Quaresma ha marcado al menos una decena de goles similares durante su carrera y también usa "la trivela" para hacer pases y cruzar.

Algunos pueden argumentar que le ayuda a esconder una debilidad con su pie izquierdo, pero Quaresma dice que lo usa porque es mucho más difícil para los defensores lidiar con él.

"Lo mejor de pasar el balón de esta manera es que el defensor no sabe hacia dónde va el balón (...) es mi habilidad favorita en el juego", dijo una vez en un video de entrenamiento de la UEFA.

"La clave a recordar es deslizar el pie por dentro y debajo de la bola (...) para así conectar la esquina inferior izquierda con el pie derecho (...) esto le dará el giro correcto".

El gol de "trivela" favorito de Quaresma fue en un partido clasificatorio para la Eurocopa 2008 contra Bélgica, cuando recibió el balón en el borde del área y anotó con un tiro que entró al fondo de la red y dejó al arquero inmóvil.

Sin embargo, Quaresma siempre ha sido una especie de inconformista, y su carrera ha sido un asunto de frenar y volver a empezar.

Criado en la academia juvenil del Sporting de Lisboa al mismo tiempo que Cristiano Ronaldo, muchos sentían en ese momento que Quaresma era el más probable de los dos para brillar en el mundo del fútbol.

En cambio, Ronaldo se convirtió en el jugador mundial del año en cinco ocasiones, mientras que Quaresma sufrió la desesperación.

Un primer paso del Sporting al Barcelona no funcionó, ya que Quaresma se sintió frustrado por el trato del DT Frank Rijkaard.

Otra movida hacia el Inter de Milán tampoco tuvo éxito ya que rápidamente se encontró fuera de lugar con el entrenador José Mourinho y luego fue seducido por el Chelsea del exseleccionador de Portugal Luiz Felipe Scolari, sólo para que éste fuera despedido justo después de que Quaresma llegara.

En medio de todos estos problemas, no fue considerado para el Mundial 2010. Luego, fue parte del equipo provisional de 30 jugadores para 2014, pero finalmente fue descartado.

Finalmente lo ha logrado esta vez y valió la pena esperar.

"No sé cuántos he marcado, tendrás que buscar en Youtube, pero espero poder marcar más", dijo después del partido del lunes. "Siempre creo que puedo hacer algo diferente".

(Escrito por Brian Homewood en Moscú, editado en español por Felipe Iturrieta)