Los brasileños venían de ganar la Copa Libertadores, y les tocaba enfrentar al Liverpool, campeón de la Copa de Europa en el Estadio Nacional de Tokio. Los sudamericanos, liderados por el crack, Zico, hacían frente al equipo Kenny Dalglish, el más talentoso de los europeos.
1981 fue un año único e inigualable para el Flamengo que después de ganar la Copa Libertadores disputó la Copa Intercontinental en un duelo ante el campeón de la Copa de Europa: el Liverpool.
Para llegar a esta instancia, el mengão, tuvo que enfrentar a rivales de todo tipo en el torneo continental sudamericano en 1981. En fase de grupos superó a Atlético Mineiro, equipo de su país; y a dos conjuntos paraguayos, los más grandes de esa nación: Olimpia y Cerro Porteño.
En la segunda etapa, dejó en el camino a Deportivo Cali y Jorge Wilstermann. En la final hizo frente al Cobreloa de Chile, al que derrotó luego de tres partidos, este último en Montevideo, venciendo por 2-0 gracias a una de sus figuras, el volante ofensivo Zico que anotó ambos goles el 23 de noviembre.
Por el lado de los europeos, los “Reds” llegaron a esta definición, al triunfar en la Champions League. Superó en las distintas rondas al OPS de Finlandia (primera), al Aberdeen de Escocia (octavos), al CSKA Sofia de Bulgaria (cuartos), al Bayern Munich (semis), para encontrarse en la final, que se jugó en el Parc des Princes el 27 de mayo de 1981, ante el Real Madrid. Los ingleses derrotarían por 1-0, casi al cierre de los 90 minutos, a los españoles, alzándose con la victoria.
Ambos clubes venían en situaciones parecidas. Los brasileños obtuvieron el Campeonato Estadual Carioca, al superar al Vasco da Gama en tres encuentros, el último el 6 de diciembre y habían conquistado la Libertadores recientemente.
Tercera y última final del Torneo Estadual Carioca
Mientras que los de Merseyside habían iniciado la temporada 1981/1982 el 28 de agosto en el inicio de la liga local y el 5 de diciembre del 81, antes de viajar a Tokio, donde se desarrolló el choque entre ambos elencos. Llevaban a esa altura, seis partidos ganados, seis empatados y cinco perdidos, estando muy lejos de la punta del certamen. En la Copa de la Liga, habían igualado con el Arsenal a cero y esperaba la vuelta el 1 de diciembre. Por último en la Champions, venía de eliminar al AZ en octavos de final el 4 de noviembre.
Ambas instituciones tenían destacados nombres. En el “Fla” estaba el crack, Zico, un gran regateador, organizador de juego y especialista en tiros libres; su lateral izquierdo, Junior (Leovegildo Lins da Gama Junior), también era importante, tenía gran capacidad para el ataque, apoyando la construcción desde su banda. En el costado derecho, Leandro (José Leandro de Souza Ferreira), se imponía gracias a su polivalencia y despliegue físico.
En la zona de volantes estaba Adilio (Adílio de Oliveira Gonçalves), un habilidoso futbolista con gran capacidad creativa para iniciar los lances; y en delantera tenemos a Nunes (Juan Bautista Nunes de Oliveira), quien sobresalía por su potencia y por siempre aparecer en los momentos decisivos, como en finales y partidos claves.
Mejores jugadas de Zico
Los del ‘Viejo Continente’ también contaban con hombres rutilantes: Ray Kennedy era un volante que tenía una excelente técnica y un buen primer toque, además a nivel defensivo, contribuía con su fuerza y liderazgo; Alan Kennedy, marcador de punta zurdo que se sumaba al trabajo ofensivo, haciendo varios tantos; Kenny Dalglish, era inteligente, con un remate preciso y un buen regate. También estaban Sammy Lee, Graeme Souness y Terry McDermott.
Sobre los banquillos no podemos no mencionar a ambos entrenadores. El “rubro-negro” tenía a un novel Paulo César Carpegiani, quien vivía su incipiente experiencia como director técnico de manera exitosa.
Esto era un contraste con Bob Paisley, en el sentido que él estuvo casi una vida entera en el Liverpool. Primero como deportista (1939-1954), luego como fisioterapeuta y asistente técnico de Bill Shankly (1959-1974) y al final siendo el DT de los “Scousers” desde 1974 a 1983. Además en 1981 ya había conseguido muchos trofeos con los “Reds”: tres Copas de Europa, cuatro ligas inglesas, una Copa de la Liga, cinco FA Community Shield, una Copa UEFA y una Supercopa de Europa.
El duelo se desarrolló en el Estadio Nacional de Tokyo, recinto al que asistieron 62 mil personas, el 13 de diciembre de 1981. El club carioca llegó a Japón, pocas horas antes del partido, y pareciera que el poco descanso, influiría en su desempeño.
Los rojinegros alinearon a Raul Plassmann; Leandro, Marinho, Mozer, Júnior; Andrade, Adílio, Zico; Tita, Lico y Nunes.
Los titulares de los rojos fueron: Bruce Grobbelaar; Phil Neal, Phil Thompson, Alan Hansen, Mark Lawrenson; Sammy Lee, Terry McDermott, Graeme Souness, Ray Kennedy; Kenny Dalglish y Craig Johnston.
Los sudamericanos marcaron el primer gol a los 12 minutos, gracias a Zico que puso una habilitación mágica sobre Phil Thompson, para que Nunes que recibió solo batiera a Grobbelaar. El dominio del “Fla” era avasallador, Arthur Antunes Coimbra, “Zico”, manejaba el encuentro como quería, dejando atrás a Souness, su marcador, dando pases extraordinarios y regateando a sus rivales.
Los zagueros por las bandas se sumaban al ataque en todo momento y generaban una superioridad que era insoslayable para los europeos. Fue así como el juego iniciaba por los laterales y pasaba por Zico quien, daba las asistencias o probaba al portero. Fue así como llegó el 2-0. A los 34’ el volante ofensivo pateó y guardameta zimbabuense, dio un rebote y Adílio anotó.
El tercer y último tanto fue nuevamente obra y gracia de Coimbra: en el 41’ dio una habilitación en profundidad, que Nunes aprovechó marcando el 3-0 final cerrando la gran primera mitad que definió el choque.
Resumen de la definición de la Copa Intercontinental 1981
Al final en la segunda parte los ingleses subieron el ritmo pero no tuvieron las oportunidades del “Mengão”. Zico fue la gran figura y demostró todo su talento, antes de su gran exhibición planetaria: el Mundial de 1982. Flamengo por su parte llevó a Brasil la Copa Intercontinental, luego de 18 años cuando el Santos de Pelé batiera al AC Milan.
Sed de Gol 