Alberto Carvalho, director de las escuelas de Miami-Dade, es el nuevo superintendente del Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles

Alberto Carvalho, que ha dirigido las escuelas públicas del condado de Miami-Dade desde 2008 y se encuentra entre los líderes de distritos escolares más experimentados y admirados del país, ha sido nombrado el próximo superintendente del Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles, según anunciaron el jueves las autoridades del distrito.

El Consejo de Educación hizo el anuncio tras una reunión especial a puerta cerrada. En las últimas semanas, los miembros del consejo entrevistaron y deliberaron sobre los candidatos en una serie de sesiones a puerta cerrada.

Al llegar a L.A. Unified, Carvalho, de 57 años, pasa de dirigir el cuarto sistema escolar público K-12 más grande del país al segundo, asumiendo uno de los puestos de mayor perfil y más desafiantes en la educación pública.

A Carvalho se le atribuye en el distrito de Miami-Dade haber proporcionado un liderazgo estable y una mejora del rendimiento académico, y haber creado programas especiales que ofrecen más opciones de escolarización a los padres. En Los Ángeles, tendría que enfrentarse de inmediato a un distrito escolar en el que muchos estudiantes llevan bastante tiempo luchando por mejorar académicamente y que se vio aún más perjudicado por la pandemia del COVID-19.

Al tentar a Carvalho para que cambiara de costa, el Consejo de Educación de Los Ángeles logró algo que la ciudad de Nueva York -el sistema escolar más grande del país- no pudo. En 2018, Carvalho aceptó el trabajo de Nueva York, y un día después se echó atrás en televisión en directo, anunciando su decisión de quedarse en Miami.

Carvalho era parte de un grupo de candidatos que las fuentes han dicho que incluyó a personas con gran experiencia, en particular la superintendente interina Megan Reilly, la directora académica Alison Yoshimoto-Towery y la administradora regional Frances Baez. Joan Sullivan, directora ejecutiva de la organización sin ánimo de lucro Partnership for Los Angeles Schools, que administra 19 campus bajo contrato con L.A. Unified, también se consideró como parte del grupo de candidatos.

El superintendente de las escuelas de Miami-Dade, Alberto Carvalho, es visto durante una reunión de la junta escolar en marzo de 2018 en Miami, Florida.

(Joe Raedle/Getty Images)

Pero fue difícil igualar el currículum o la experiencia de Carvalho, quien es visto en el sur de Florida como un líder carismático con una vitrina de trofeos que incluye múltiples premios de “superintendente del año” de varias organizaciones nacionales y de Florida. Su distrito también ganó el Premio Broad de Educación Urbana de 2012, lo que supone un espaldarazo del difunto Eli Broad y otros críticos de los sistemas escolares tradicionales.

La calificación del distrito de Miami-Dade en el sistema estatal de rendición de cuentas ha subido a una A.

Uno de los logros de Carvalho ha sido mantener su puesto de superintendente desde 2008, más que toda una generación de estudiantes de K-12. Los superintendentes urbanos suelen durar tres años o menos, pero la carrera de Carvalho en Miami es diferente.

Desde la partida de Roy Romer en 2006, el Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles ha tenido ocho jefes escolares “permanentes” o interinos. El ex superintendente Austin Beutner renunció en junio al final de su contrato de tres años, en parte citando el agotamiento después de gestionar el sistema escolar a través de una huelga de maestros y una pandemia. Reilly ha dirigido el sistema escolar desde entonces.

Las historias de éxito de Carvalho -y sus puntos malos- han sido reseñadas repetidamente en los periódicos y medios de comunicación de Florida.

Nacido en Portugal, llegó a Estados Unidos a los 17 años. Carvalho aprendió inglés de joven y se abrió camino rápidamente en trabajos de construcción y restauración mientras asistía al Broward Community College. Más tarde obtuvo una beca para la Universidad de Barry y se matriculó en la carrera de medicina. Sobresalió académicamente, pero dio un duro giro a su trayectoria profesional cuando, a mediados de sus 20 años, hizo una entrevista para un puesto de profesor en el Miami Jackson Senior High. Le ofrecieron un trabajo el mismo día, según informó un perfil del Tampa Bay Times en 2019.

Después de cuatro años en el aula -enseñando física, química y cálculo- se convirtió en subdirector. El superintendente de entonces quedó tan impresionado que llevó a Carvalho a trabajar al centro sin haber sido director. Carvalho supervisó programas federales y más tarde se convirtió en el jefe de comunicaciones del distrito. Adquirió más experiencia supervisando la administración de subvenciones y ejerciendo presión sobre los funcionarios estatales.

Bajo la dirección del superintendente Rudy Crew, Carvalho puso en marcha varias iniciativas, como la Academia de Padres y la Zona de Mejora Escolar, centrada en las escuelas con bajo rendimiento académico.

Después de convertirse en superintendente, Carvalho llenó un vacío en su currículum, sirviendo como director. Se puso al frente de un nuevo plantel llamado iPrep Academy, una escuela magnet de preescolar a 12º grado “diseñada para promover el respeto y la responsabilidad entre los estudiantes y el personal”, dice su sitio web. Todos los alumnos están obligados a tomar clases de honor.

Su carrera y su vida personal también han tenido puntos bajos, incluyendo dos divorcios y una bancarrota, según un perfil de 2008 en el Miami Herald. Y justo cuando Carvalho comenzó su mandato al frente de Miami-Dade, salieron a la luz correos electrónicos embarazosos entre él y un reportero de la sección. Los correos datan de un período anterior a su selección como superintendente.

El nuevo jefe de escuelas asumirá el cargo de Los Ángeles en un momento crítico. El sistema cuenta con miles de millones de dólares de ayuda por el coronavirus, fondos federales adicionales y un aumento de los ingresos fiscales del estado. Sin embargo, hay una gran cantidad de trabajo por delante. Al aislamiento y las deficiencias de la enseñanza a distancia le ha seguido una difícil readaptación a las clases presenciales. El distrito también se ve acosado por el descenso de las inscripciones y un déficit presupuestario estructural a largo plazo.

“Los últimos 21 meses han sido devastadores para muchas de las familias a las que servimos en L.A. Unified”, dijo la presidenta del consejo escolar Kelly Gonez en una entrevista reciente. “La pandemia ha supuesto una carga desigual de enfermedad, muerte, pérdida de empleo y trauma que ha recaído de forma desproporcionada en las comunidades de color. Nuestro superintendente deberá tener en cuenta los profundos impactos de la pandemia, las protestas por la justicia racial y las necesidades urgentes de nuestros estudiantes y familias”.

Más del 90% de los padres, miembros de la comunidad y empleados dijeron en una reciente encuesta del distrito que quieren que el próximo superintendente tenga “experiencia trabajando en escuelas públicas como profesor y/o administrador”. En casi la misma proporción, los que respondieron también pidieron alguien que tenga experiencia “trabajando en y con comunidades grandes y diversas” y “gestionando una organización muy grande en transición”.

Carvalho cumple con estos parámetros, además de ser una persona de fuera con una nueva perspectiva. Tendría que dominar rápidamente el funcionamiento y el personal de un sistema masivo y complejo con una estructura de gobierno muy diferente a la de Florida. L.A. Unified es el único sistema escolar del país con un Consejo de Educación pagado y a tiempo completo, en el que los miembros individuales seleccionan y dirigen a su propio personal.

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