Los aeropuertos son lugares de despedidas y reencuentros, pero también de sueños, y en el aeropuerto de Kastrup (Copenhague) ha comenzado el sueño del Mundial de Rusia 2018 para la selección de Dinamarca. Su máxima estrella, Christian Eriksen, lo tiene claro: mínimo pasarán de la fase de grupos.
"Pasaremos de fase de grupos. Ese es nuestro objetivo. Después veremos qué pasa", aseguró a los medios que se concentraron en la terminal para despedir al combinado dirigido por Age Hareide.
"Hemos estado luchando durante dos años para ir a la Copa del Mundo. Vamos a divertirnos y, con suerte, a tener un buen resultado. Nos veo muy bien", explicó.
En Sudáfrica empezó todo
Hace ocho años, Christian Eriksen ya estuvo en el Mundial de Sudáfrica pero su corta edad (tenía 18 años) hizo que disputara muy pocos minutos. Ahora, es la referencia de la dinamita roja
"Espero tener un poco más de protagonismo que en Sudáfrica. Tengo más experiencia y he mejorado mucho ", concluyó antes de subirse al avión rumbo a Rusia.